
Es extraño el dÃa en el que los noticieros no abren sus portadas hablando sobre la deuda pública y la deuda privada, aunque pocos sean los ciudadanos que logren diferenciar con claridad estos dos conceptos financieros. La deuda, de forma general, es una fórmula de financiación que se usa como herramienta para llevar a cabo las más diversas inversiones, proyectos, pagos y gastos.
Deuda pública
Índice de contenido
La deuda pública es aquella que emite un gobierno con el objetivo de financiar su proyecto y los gastos derivados. Sus fórmulas para llevarla a cabo son las letras del tesoro, los bonos del estado y las obligaciones. De este modo, tanto el Estado como sus administraciones lograrán reducir la cantidad de débito contraÃdo, implicando, como cabe suponer, medidas que afectarán de un modo u otro a la población. El gobierno podrá llevar a cabo las actividades necesarias para facilitar una recuperación económica y un proceso de consolidación fiscal estable, asà como la reducción de las tasas de interés.
Deuda privada
La deuda privada, por su parte, es un tipo de activo financiero emitido por las entidades privadas para lograr llenar sus arcas de forma rápida y tener acceso a diferentes tipos de compras, pagos, y actividades, no es otra cosa que una alternativa al habitual préstamo ofrecido por un banco. Este tipo de deuda es la que se genera al solicitarse un préstamo bancario o cuando una compañÃa emite bonos y pagares. El total de estos préstamos serÃa la deuda privada de un paÃs.
Las caracterÃsticas diferenciadoras de este tipo de deuda son encontrarse enmarcada dentro de la categorÃa de renta fija que presenta un rendimiento previamente previsto (ocasionalmente puede tener un tipo de interés variable). Por otro lado, es un activo que ofrece mayor seguridad que las acciones, la deuda emitida por empresas de sectores como el de los servicios básicos siempre presentan menos riesgos, puesto que la demanda se mantiene estable. Y es que el riesgo del emisor va a determinar el tipo de interés pagado por la deuda contraÃda y, como cabe suponer, a mayor riesgo, mayor rendimiento.
La inversión en deuda privada ofrece diferentes y numerosas alternativas, ya sea de forma directa o haciendo uso de un fondo de inversión, activos que se negocian en el mercado de valores. En definitiva, independientemente a que sean privadas o públicas, toda deuda es un préstamo y, por lo tanto, una obligación que se ha de gestionar según las capacidades y las necesidades de cada cual.
En este sentido, el mercado de intercambio de divisas internacional o Forex, se entrelaza con la deuda pública o privada de un paÃs. Un inversor que quiera financiar deuda pública emitida en moneda local de un determinado paÃs podrÃa acudir al mercado Forex para cambiar cierta cantidad de su moneda por la moneda de ese paÃs en cuestión.
Invertir en Forex (Foreign Exchange)
El mercado Forex es el lugar donde se intercambian las divisas a nivel global, considerado el mercado más activo del mundo, donde participan desde empresas, multinacionales y bancos hasta particulares. Su volumen de operaciones diarias se estima en un valor de 6,6 billones de dólares, es decir, 4,5 veces el PIB anual de un paÃs como España.
Es un entorno ideal para operaciones de conversión de moneda que tiene como objetivo la generación de beneficios. La enorme cantidad de divisas que se convierten diariamente produce movimientos de precios en algunas de estas monedas extremadamente volátiles, siendo este uno de los factores más importantes a valorar al iniciarse en las operaciones con el mercado de divisas Forex.
El trading online es una forma de invertir en Forex, sin la intención de comprar deuda después, y sin comprar ni vender divisas sino operando con sus fluctuaciones a través del trading online de CFDs. Uno de los conceptos que hay que conocer y manejar al operar en el trading de Forex es el apalancamiento, que no es otra cosa que una herramienta que permite al trader invertir por un valor nominal mayor al valor de los recursos utilizados, usando el capital que un bróker presta. Sin embargo, esta fórmula conlleva riesgos que hay que conocer.
El apalancamiento y sus riesgos
Cabe mencionar antes de avisar sobre sus riesgos que el apalancamiento puede llevarse a cabo tanto por empresas como por particulares e incluso desde el ámbito familiar. Se trata, como ya se ha comentado brevemente, de utilizar una deuda para captar una mayor cantidad de capital para invertir, en este caso, en el mercado de divisas, comprando más cantidad de la moneda elegida. En otras palabras, se invierte con un dinero que no pertenece al inversor, sino que proviene de un proceso de endeudamiento. Por este motivo, el uso del apalancamiento puede originar una importante pérdida de capital si se realiza una mala inversión.